Pasar al contenido principal
Desde ASAJA-Andalucía exigimos que cese la agresión permanente al mundo agrario.

Agravios del Gobierno de Sanchez al Sector Agrario

Desde ASAJA-Andalucía nos preguntamos ¿QUÉ TIENE ESTE GOBIERNO CONTRA EL CAMPO?, ¿QUÉ LE HEMOS HECHO?, que no uno, sino cinco ministerios, están continuamente actuando en contra de nuestro sector:
Por un lado, la absoluta ignorancia del ministro de Consumo, Alberto Garzón que lejos de promocionar nuestros productos se dedica a desprestigiar el consumo de nuestras carnes, a nuestro sector ganadero y al aceite de oliva.
Por otro lado, una vicepresidenta del Gobierno, la de Transición Ecológica, Teresa Ribera, que nos ningunea denegando reiteradamente la puesta en marcha de la doble potencia para los contratos de riego en la agricultura, lo que nos permitiría ahorros importantes, “saltándose a la torera” lo que ya se ha fijado por 3 leyes distintas desde el 2018.
Sin olvidar que no ha impulsado, ni puesto en marcha las necesarias infraestructuras e inversiones hidráulicas que España y muy especialmente esta región necesitan, como ahora en plena sequía se constata una vez más (algún día volverá a llover y a partir de ese día ya quedará un día menos para la siguiente sequía), ¿qué tiene que pasar en este país para que nos demos cuenta que la sequía es una cuestión cíclica y que hacen falta acometer a la mayor brevedad posible las obras de regulación pendientes, y además permitir la construcción de pequeños pantanos, micro embalses, y balsas de riego que son más fáciles de ejecutar y dan menos problemas.
Tampoco impulsa una planificación hidrológica que favorezca el desarrollo socioeconómico del sector.
Y sin querer olvidarnos de su prioridad, que son los depredadores, y no nuestra cosechas o ganados (si no, que se lo pregunten a nuestros colegas del centro y norte de España con el asunto del lobo).

La tercera en discordia es la vicepresidenta de Empleo, Yolanda Díaz ya que en materia laboral tampoco soplan buenos vientos para el campo. Esta Ministra se ha dedicado a una persecución, acoso y derribo contra el sector agrario desde el principio, si no que se lo pregunten a los inspectores de trabajo cuando se les exigía desde el Gobierno que preguntaran en nuestros tajos si había algún signo de esclavitud por parte de los agricultores y ganaderos hacia sus trabajadores, o como muestra el hecho de que nuestro sector es al único que se nos inspecciona con la Guardia Civil, o la campaña de miles de cartas amenazantes que se han enviado para convertir a nuestros trabajadores eventuales en fijos o fijos discontinuos, como si ese fuera el problema. Cuando la realidad es que hay falta de mano de obra en nuestro sector.
Y encima, aprueba una reforma laboral de espaldas al campo, con la oposición de ASAJA, eliminando de un plumazo el contrato por obras y servicios y limitando los contratos temporales, cuando todos sabemos que el campo tiene como condición intrínseca la temporalidad de las campañas agrícolas y la eventualidad de las tareas. Con esto, a partir del pasado mes de marzo, se nos ha puesto a los agricultores y ganaderos “al pie de los caballos”, incrementando considerablemente nuestros costes, lo que agudizará la crisis del campo y destruirá empleo. Sin olvidar una nueva subida del SMI que en los últimos cuatro años ha supuesto un 35,8%, lo que rompe y dinamita completamente la negociación colectiva y los convenios ya firmados y pactados en el campo. Y además SE PLANTEA UNA SUBIDA EN MÁS DE UN 40% EN LOS COSTES SOCIALES PARA LOS AUTÓNOMOS AGRARIOS.
El ministro de Agricultura, Luis Planas, que se supone que es quién nos debería defender al ser el de agricultura y no es capaz de poner en marcha ni una sola medida de efectiva fiscalidad, ni un plan de choque para aliviar la subida de costes que afecta al sector agrario actualmente, y que nos asfixia y nos anula nuestra escasa rentabilidad: a. Semillas 20 % b. Piensos 30 % c. Abonos 150 % d. Energía eléctrica 270 % e. Gasóleo 73 % f. Fitosanitarios 190 % g. Fertilizantes 210 % Sigue echando la culpa a Bruselas, “balones fuera”. Este ministro es el que, en plena crisis de sequía con unos efectos ya devastadores, ha planteado una serie de medidas que se quedan muy cortas y muy lejos de la realidad y de lo que necesita nuestro sector.
Y este mismo ministro es el que, ahora nos propone un recorte de ayudas de la PAC, solo y exclusivamente para Andalucía de casi 500 millones de euros durante el nuevo periodo.
Mientras afirma que la nueva PAC será buena para España, desde ASAJA nos preguntamos si Andalucía tiene 230.000 explotaciones que es el 35% de todos los agricultores a nivel nacional (es decir 1 de cada 3) y aglutinamos el 36% de la renta agraria de España, representando el 20% de la SAU nacional y generando el 35% del empleo agrario nacional, como una reforma tan lesiva y tan drástica para Andalucía con lo que representamos, puede ser buena para España.
¿En qué se traduce? El 53% de todos los agricultores y ganaderos de Andalucía perderán fondos con la nueva PAC (122.000 agricultores), es decir, 1 de cada 2.
En algunas provincias como es el caso de Sevilla o Jaén, el porcentaje subirá al 60%.
En Andalucía 750.000 ha. de secano, perderán más del 30% de sus fondos actuales, 700.000 ha. de olivar perderán más del 25% y todo el regadío de Andalucía perderá entre el 30 y el 40%.
Y en este caso, no se hace por ignorancia, se hace por mala fe y con plena conciencia, sabiendo que esta reforma de la PAC es contra Andalucía. Y esto se ha hecho por ideología, no basándose en ningún criterio agronómico, económico o técnico (de hecho, durante el proceso de reforma se nos ha ocultado siempre el estudio de impacto económico que tendría la propuesta del Ministerio). Con esta propuesta, se favorece a otras regiones de España y a otras zonas menos productivas y desfavorecidas, a costa de las zonas productivas de nuestras provincias, o lo que se lo mismo, a costa de lo que los agricultores y ganaderos de Andalucía han generado con su trabajo y esfuerzo durante tantos años.
Si no logramos cambiar esta propuesta este ministro pasará a la historia como el que ha perpetrado la peor reforma de la PAC de la historia para nuestra región.
Con lo que se propone, nuestras provincias, nuestros pueblos y en definitiva nuestros agricultores y ganaderos serán los grandes perjudicados.
Por último, La ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, impulsora del recientemente aprobado anteproyecto de ley de protección y derechos de los animales elaborada con un total desconocimiento de la realidad. Esta normativa sería muy perjudicial para la caza al incluir propuestas como la obligación de educar y socializar a los perros de caza (también otros animales auxiliares) para no dañar a otros animales o la imposibilidad de adiestrar perros de caza en su conducta innata.
Se trata de otra normativa más de este Gobierno redactada desde el desconocimiento y la ignorancia que va en contra del modo de vida rural.